El Navegante

La Travesía de la Vida en 'El Navegante' de Eduardo Gatti

La canción 'El Navegante' de Eduardo Gatti es una reflexión poética sobre el viaje de la vida y el crecimiento personal. La letra comienza con una sensación de inquietud y cambio, donde el cantautor siente que su mundo conocido, simbolizado por la 'quietud perfecta', comienza a 'temblar'. Esto puede interpretarse como una metáfora de los momentos en que nos enfrentamos a cambios significativos o crisis que nos hacen cuestionar nuestras bases y valores, representados aquí por 'mi infancia y su calor'.

El protagonista de la canción se ve confrontado por su familia y amigos, lo que le lleva a reflexionar sobre su vida y las decisiones que ha tomado. La 'tormenta' podría simbolizar las dificultades y desafíos que enfrentamos, y la esperanza de que de estas experiencias difíciles puedan surgir 'las flores de un lugar Azul e inmenso', es decir, nuevas oportunidades y crecimiento personal. La canción también aborda el tema de la fe y la convicción, sugiriendo que los valores y creencias que uno mantiene son inquebrantables y forman parte esencial de la identidad de uno, 'es fogata que corre en tus venas'.

Finalmente, la canción cierra con una serie de imágenes náuticas que refuerzan la idea de la vida como un viaje. El 'navegante' podría ser cualquier persona en su viaje a través de la vida, enfrentando 'tormentas indomables' y momentos de incertidumbre ('la niebla imponderable'). La mención de 'mujeres que lloraban hasta el amanecer' y un 'amigo, hermano' con 'ojos de fuego y noche' añade un elemento humano y emocional al viaje, sugiriendo que las relaciones y los seres queridos son parte integral de nuestra travesía.