Fiesta

La Fiesta de la Igualdad Efímera

La canción "Fiesta" de Joan Manuel Serrat es una crítica social envuelta en la descripción de una celebración popular. La letra comienza con una imagen de transformación: una calle que pasa de estar oscura y sucia a estar iluminada y decorada para una festividad. La referencia a las bombillas y las banderas de papel sugiere un ambiente de alegría y colorido, típico de las fiestas de San Juan, una noche en la que tradicionalmente se celebra la llegada del solsticio de verano.

Sin embargo, Serrat utiliza esta escena festiva para hacer una observación más profunda sobre la sociedad. La fiesta se convierte en un espacio temporal donde las diferencias de clase y estatus se desvanecen. El 'noble y el villano', el 'prohombre y el gusano' se unen en un baile comunitario, simbolizando una igualdad que solo existe en este contexto efímero. La mención de que 'nuestras miserias van a dormir' refuerza la idea de que la fiesta permite un breve olvido de las preocupaciones y desigualdades cotidianas.

No obstante, la canción termina con un retorno a la realidad. La resaca representa el despertar de la ilusión de igualdad, y cada quien vuelve a su posición social habitual: el pobre a su pobreza, el rico a su riqueza. Serrat destaca la naturaleza cíclica de este evento, donde la fiesta es solo un paréntesis en la rutina de la desigualdad. La 'zorra pobre' y la 'zorra rica' regresan a sus respectivos lugares, y el avaro a sus riquezas, subrayando que la unidad observada durante la fiesta es solo temporal y superficial.