So It Goes...

La Magia del Amor y la Pasión en 'So It Goes...'

La canción 'So It Goes...' de Taylor Swift es una exploración íntima de la atracción y la relación amorosa, marcada por una intensidad que se desliza entre lo dulce y lo peligroso. La letra utiliza metáforas para describir la conexión magnética entre dos personas, donde Swift se compara con una 'hostage' (rehén) de sus sentimientos, sugiriendo una mezcla de vulnerabilidad y deseo. La referencia a 'my magician' (mi mago) y 'illusionist' (ilusionista) indica que su pareja tiene un efecto hipnótico sobre ella, capaz de hacer que todo lo demás desaparezca cuando están juntos.

La repetición del verso 'So it goes' actúa como un mantra que acepta la naturaleza cíclica de su relación, donde los altibajos son inevitables, pero la atracción mutua es ineludible. La canción también toca la idea de que, aunque no se vean como personas 'malas', juntos se permiten explorar aspectos más atrevidos y tal vez prohibidos de su personalidad y sexualidad, como se sugiere en los versos 'You know I'm not a bad girl, but I / Do bad things with you'.

Musicalmente, 'So It Goes...' se alinea con el estilo pop y synth-pop de Swift, con un tono más oscuro y seductor que refleja la madurez de su álbum 'Reputation'. La canción captura la complejidad de una relación donde la pasión y la intensidad pueden ser tanto embriagadoras como desafiantes, y donde el amor se convierte en un juego de poder y seducción.